
Un riesgo psicosocial importante
El estrés laboral es uno de los principales riesgos psicosociales en el entorno de trabajo.
El estrés es una respuesta natural del cuerpo ante situaciones que percibe como desafiantes o amenazantes. Es un mecanismo de defensa que activa el sistema nervioso y libera hormonas como el cortisol y la adrenalina, preparándonos para reaccionar rápidamente.
Factores que en el ambiente laboral provocan estrés: sobrecarga de trabajo, incertidumbre laboral y falta de conciliación.
Hay dos tipos de estrés:
- Eustrés: Estrés positivo. Nos motiva y nos ayuda a rendir mejor en ciertas situaciones.
- Estrés agudo: Es temporal y ocurre en respuesta a eventos específicos (como hablar en público). Si se canaliza adecuadamente, puede generar una gran concentración.
- Distrés: Estrés negativo. Nos abruma y afecta nuestro bienestar físico y mental.
- Estrés agudo negativo: También es temporal y ocurre ante situaciones concretas (como un examen o una exposición). Si no se canaliza bien, puede desbordar la mente y dificultar el rendimiento.
- Estrés crónico: Se mantiene durante un largo período y puede afectar la salud si no se maneja correctamente (por ejemplo, ante problemas laborales persistentes).
Síntomas del estrés
- Físicos: Dolores de cabeza, tensión muscular, fatiga, insomnio.
- Cognitivos: Problemas de concentración, pensamientos negativos.
- Emocionales: Ansiedad, irritabilidad, tristeza.
- Conductuales: Cambios en el apetito, aislamiento social.
Consecuencias del estrés en las personas trabajadoras
- Físicas: Dolores musculares (espalda, cuello), fatiga crónica, trastornos del sueño, problemas cardiovasculares (hipertensión, taquicardia) y trastornos gastrointestinales.
- Psicológicas: Ansiedad, depresión, irritabilidad, desmotivación, baja autoestima.
- Conductuales: Aislamiento social, consumo de alcohol, tabaco o estupefacientes, absentismo laboral, mayor riesgo de accidentes y errores.
Consecuencias del estrés para la empresa
- Riesgo de sanciones o demandas laborales.
- Disminución del rendimiento y de la calidad del trabajo.
- Aumento de conflictos y desmotivación general del personal.
- Rotación de personal y dificultad para retener talento.
- Aumento del absentismo.
- Deterioro de la reputación empresarial.
Cómo manejar el estrés
- Hacer ejercicio de forma regular.
- Practicar técnicas de relajación como la meditación o la respiración profunda.
- Mantener una alimentación equilibrada.
- Organizar el tiempo y establecer prioridades.
- Buscar apoyo en amigos, familiares o profesionales.
En caso de que te encuentres en una situación de estrés relacionada con el trabajo o con algún proyecto, contacta con los delegados y delegadas de prevención de USO o escríbenos al buzón de la Sección Sindical de USO Indra Minsait para que podamos ayudarte.


